sábado, 25 de junio de 2011

De Cuando Rere Hizo El Estofado Más Grande

Rere fue una fiesta

El clima había estado amenazante. En la víspera había llovido y en la mañana los cielos estaban cubiertos y más de algún chubasco mojó las gredosas calles de Rere.

Pero los habitantes de esta pequeña localidad tenían claro que ese sábado, a como diera lugar, debían pasar a la historia con una singular actividad: preparar el estofado más grande del mundo.

Este plato, que forma parte de una de las antiguas tradiciones campesinas para celebrar a San Juan Bautista, mezcla en forma precisa las carnes de cerdo, de gallina, de conejo, el tocino y las longanizas, más las cebollas, los ajos, el comino y la sal.

Pero en Rere, esta receta no podía ser una sólo una degustación de un plato típico que ya se está olvidando.

No, la meta era hacer historia con el estofado. El año pasado fue el más grande de Chile pero el actual buscada certificar que era el más grande del mundo.

Y sus gestores, el centro cultural Buena Esperanza con el apoyo el municipio y la parroquia, no escatimaron en recursos. 250 kilos de cerdo, 764 cebollas, 500 ajos, 570 conejos, 50 kilos de longanizas, 30 kilos de tocino (o cuero de chancho), un kilo de comino y dos de sal fueron cocinados, a fuego lento y con sabia maestría, desde la mañana del sábado.

Hasta la olleta usada, de más de 640 litros de capacidad y donde pueden comer perfectamente unas mil 200 personas, tenía su historia. Había sido recuperada de un sector cercano por la agrupación cultural como parte del proyecto de recuperación de los objetos antiguos y se estima que tendría unos 400 años de antigüedad.

Cerca de las 2 de la tarde, cuando los comensales llegaban sin parar hasta el comedor habilitado en el salón parroquial, el notario público de Yumbel y autoridades presentes certificaron que se había logrado plenamente el objetivo.

Después siguió la fiesta. Los conjuntos folcóricos dieron paso a los payadores, a las obras de teatro, a las pruebas de San Juan y la fiesta final. Duró todo ese día sábado, pese al frío y al clima que ya no estaba tan amenazante.