martes, 30 de junio de 2009

Temporada de Patos. Temporada de Elecciones

O La Triste Historia de la Paranoia en Tiempos de Elecciones

Uno de los monólogos más bellos (por su honestidad) que la literatura ha producido fue en los albores del Renacimiento, tan válido en la actualidad como lo fue en su tiempo. Elogio a la Locura de Erasmo de Rotterdam. No fue producto de un discurso o de un entorno con público cautivo, fue más bien la dulzura de un sentimiento. La Locura, para los entendidos una patología, que arrojándose el derecho a defenderse por si misma plantea los elementos más congruentes que cualquier otro monólogo desearía tener.

Producto de la Locura (Moria), amada y amante de si misma, surgen tantos puntos cardinales para la mente humana (redundancia) como definiciones podemos inventar. En nuestro caso La Paranoia tan visceral como nuestro sentido de la sobrevivencia y tan diplomática como la avaricia en tiempos de crisis, surge periódicamente cuando el poder tiene atisbos de cambiar de manos (manos ajenas). Mientras los grandes se revolcaban buscando definiciones que den satisfacción a tantas enfermedades mentales y así poder darle un orden a la bella problemática social, yo sólo veo a una araña de rincón tratando de escapar de la “política del cuco” cada vez que la señora en la casa terminaba de ver el matinal o esos educativos y entretenidos programas de animales donde la estrella de la noche era la pobre araña de rincón.

Recuerdo de mis tiempos de estudiante cuando algunas madres llevaban a sus niños al Museo Nacional de Historia Natural prácticamente como excusa, puesto que de su cartera sacaban tímidamente una consulta muy bien envuelta para que no se escape.”¿esta es la Araña de Rincón?”. Pobre araña, cuántas persecuciones debió haber sufrido en pos de hacer el aseo, cuantas cacerías de brujas estimuladas por ese bichólogo que auspiciado por el people meter hablaba de las maravillosas cualidades morfológicas y MORTALES de éste minúsculo amigo.

Esa misma sensación de necesidad imperiosa que tenía en aquellos tiempos de darle cierto charchazo con GPS a cada persona con síntomas de paranoia la tengo ahora cuando llevamos más de un año con una campaña publicitaria por parte de los medios de comunicación (que bien saben cómo hacerse siempre necesarios), levantando teleserie tras teleserie, partiendo por los exagerados precios del petróleo, la crisis de las subprime o crisis financiera internacional (hasta suena técnicamente bello, pero cuando fue la crisis en Tokio no demoraron en llamarla la crisis asiática), luego partimos con la listeria, detrasito le seguía el A H1N1 y ahorita se nos vienen las elecciones.

A nuestra sociedad "le pusimos primera" y ahora por el poco tiempo que tenemos (mentira tenemos bastante) no podemos detenernos a respirar profundo y digerir nuestros propios comentarios. Mientras paladeaba una cazuela en la vega me toca escuchar entre dos caballeros sobre la, en ese entonces, fiebre porcina que no había arribado a chilito lindo, según ellos en las noticias decían que ya habían miles de muertos en México. De viaje a Santiago, por estos días, me encuentro con que ya no se puede toser o estornudar en el Metro sin que me miren raro, bueno que en la capital siempre han habido instintos paranoicos en particular cuando se trata con desconocidos.

“Alguien Te Mira”

Ahora el chiste se viene con las elecciones, algo muy similar a lo que ocurrió en las elecciones entre Lavín y Lagos, andan todos los funcionarios públicos con depresión porque “ahora si que parece que…” Pero no voy a ser tan generalista y hablar de todas las reparticiones públicas, aquí solo se ralla la papa en cultura y sólo se puede hablar de antecedentes consumados producto de mi fantasiosa realidad.

El 11 de marzo apareció en un par de diarios capitalinos una declaración de los trabajadores del Consejo Nacional de la Cultura criticaban fuertemente la administración ministerial y por sobre todo la irresponsabilidad de la ministra de cultura en la atención a las necesidades de los trabajadores y sobre temas de infraestructura. Dos días duraron las réplicas entre Valparaíso y Santiago. Curiosamente el tema murió ahí. Nada extraño ya que se planteaba en duda la capacidad operativa en términos de personal e infraestructura; como probando la pesca con mosca, tiré el tema en Nuestro Bio Bío.cl. Nunca me fue bien con cebo muerto. Y el tema estaba cerrado desde el día en se dieron las primeras publicaciones. En grupos de trabajo pequeños los elásticos son bastantes eficientes.

De infraestructura y faltas de personal, si no se plantea en el momento oportuno es porque no hay problemas, y bueno cualquiera pensaría que con las nuevas dependencias para Concepción (bien simpática la casona en comparación al gallinero de antes) y Chillán (una inversión bastante considerable) el tema estaba sanado. Pero… siempre hay un pero.

El 20 de mayo se realizó una Jornada de Evaluación y Reflexión de las Políticas Culturales 2005-2010 expuesta por Luis Aguirre Director del Consejo Regional. Además de lo obrado hasta la fecha, por suerte fue un buen resumen de 4 años, hubo un acercamiento a la escalerilla del escenario para iniciar el tiempo de preguntas y conversación (esa es la parte de la reflexión). Esa técnica de alejarse del estrado permite impactar en el auditorio para que las flechas apunten más bajo y el show de críticas no se centren en una sola figura. Eso lo hacía yo en mis tiempos de dirigente y lo seguí haciendo cuando me tocaba hacer clases. El resultado es maravilloso.

Conclusión. Faltan recursos, infraestructura y personal para poder cumplir con los programas y acciones del Consejo Regional de la Cultura y las Artes y así poder tener la cobertura regional que uno idealiza y sueña. Sin embargo, la pega esta bien hecha y los resultados están a la vista.

Eres Dueño de tu Silencio y Esclavo de Tus Palabras

Mi conclusión: Si falta personal y recursos y no se planteó en su oportunidad y sólo se dice (medianamente público) cuando se necesita dar justificación al andar “en la medida de lo posible” de las actividades del Consejo Regional de la Cultura y Las Artes en medio de un público plenamente atento, sin crítica (ni blanda ni dura) y conscientemente neutro, es sólo para lavarse las manos y supongo que es tan válido para cultura como para cualquier Seremi (es bueno sociabilizar la información pero en aquella oportunidad sólo asistimos 3 personas de Bio Bío y desconozco si hubo de Arauco y nadie de Ñuble). En la práctica es la actitud de todo funcionario público cuando hay que dar cuentas de lo hecho, el problema es que hay que quedar bien con los demandantes, porque los jefes leen cualquier informe de cultura y se dan por satisfechos, no digamos que el Intendente Regional versa mucho de cultura.

Curiosamente en cultura no hay presiones para trabajar, nadie dice nada, no hay sindicatos haciendo protestas, no hay organizaciones haciendo lobby, no hay una comunidad generando opinión. En Cultura se trabaja solo y sólo generando opiniones personales las cuales valen por el nivel de personaje que las emite. En cultura, el Consejo Regional de Cultura al igual que las demás dependencias del gobierno, gobernaciones provinciales incluidas, son y actúan como otro conjunto folclórico más, con más recursos, con más personal y con dedicación exclusiva para “hacer cosas”. Pero cuando andan excusándose con que falta personal e infraestructura y hasta posiblemente recursos para ser plenamente funcionales y dar satisfacción a las necesidades planteadas, debo decir que pueden ser explicaciones muy viables pero cuando NO hay una propuesta para solucionar aquellos problemas, las explicaciones se convierten en excusa. Una excusa que necesariamente indica que o no se desea “hacer la pega” o “algo” está pasando.

Pensando en el “Algo” más que en la falta de voluntad. Ciertamente estamos a menos de un año de un cambio de gobierno, y así como van las cosas una reñida definición de quien será el próximo Director Regional de Cultura y aparecen las paranoias propias de quien cree que va a perder el manejo de los recursos para seguir una línea de trabajo. Algunos dicen que ante el riesgo efectivo del cambio de manos se están gastando todas las platas que se pueden gastar, otros para no dar la imagen de problemáticos no piden más de lo que le dan y con eso dicen que son eficientes con los recursos asignados, y otros prefieren seguir como consultores de cultura ante ese eventual cambio de política, pero lo más ilógico es que tenga uno que escuchar el temor a que, con este circunstancial cambio de manos del poder administrativo, se va a perder la “cultura”, esa cultura popular que para los de izquierda los de derecha no comprenden.

Para todos ellos les recomendaría leer algo de la historia de Buda y dejen de temer por los cambios, en particular para aquellos que aún viven con sus conceptos de izquierda y derecha. A mi hija de un año le tengo dos pañales, uno de la alianza y otro de la concertación. Un pañal para el cambio (o se le coce el poto) y otro para darle de comer (o se me ensucia). Ambos se hicieron necesarios, perdón por la redacción, se hicieron ser necesarios.

Por último, cuando hubo alguien quien escribió el conjunto perfecto de palabras que uno desearía, sólo queda hacer un excelente plagio con todas sus letras: “me sorprende esa hipersensibilidad de algunos hombres de hoy (1509), a quienes ofende todo lo que no sean alabanzas. También se da el caso de mucha gente con el sentido religioso tan viciado que soportan más las más terribles blasfemias contra Cristo que el más ligero chiste sobre el Papa o el príncipe, sobre todo si, por tal chiste, creen amenazado su pan de cada día.”

Luis Fraczinet
Poeta Cesante