lunes, 4 de febrero de 2013

Especialistas Informaron El 2010 Que Puente Chacabuco No Resolverá Problema De Congestión

Señor
Director
Presente:

El grupo de especialistas en las áreas de transporte, urbanismo y planificación territorial abajo firmantes hemos seguido con atención los anuncios hechos por distintos representantes del Estado respecto de la reparación de los puentes Llacolén y Juan Pablo II y de la construcción de un nuevo puente sobre el Bio Bío para resolver el complejo problema de conectividad vial provocado por el reciente terremoto en el Gran Concepción.

Al respecto, vemos con profunda preocupación la posibilidad de que se priorice la construcción del puente Chacabuco por sobre el que debe ser el verdadero puente del Bicentenario: el puente hasta ahora denominado “Industrial” (término que conduce a errores al sugerir que sería utilizado sólo por camiones).
Previo al terremoto del 27 de febrero, en San Pedro de la Paz existía congestión en los períodos punta, en la Avda. Pedro Aguirre Cerda y Ruta 160 en el tramo entre Avda. Michaihue y el Puente Llacolén, siendo particularmente intensa en el tramo entre Diagonal Bio Bio y el acceso al Puente Juan Pablo II.

Esta congestión es producto del importante flujo de automóviles, asociado al fuerte crecimiento inmobiliario en la comuna de San Pedro de la Paz y Coronel, particularmente en los sectores aledaños a la Ruta 160, y no al tránsito de camiones pesados. Para graficar este punto basta decir que en el Gran Concepción, aproximadamente el 75% de los flujos vehiculares está compuesto por vehículos particulares y sólo un 12% por camiones, correspondiendo el restante porcentaje a transporte público y otro tipo de vehículos. El número de proyectos residenciales en desarrollo en torno a la Ruta 160 y la disponibilidad de terrenos indican que esta tendencia seguirá aumentando en el mediano y largo plazo.

De aquí que sea necesario asegurar que la importante inversión que se realice con fondos públicos para resolver el principal problema de conectividad vial del Gran Concepción, resuelva el problema de fondo.

En este sentido la puesta en marcha del puente Chacabuco sólo aumentará los niveles de congestión existentes pre-terremoto en San Pedro en el tramo entre el acceso sur al Puente Chacabuco y el Puente Juan Pablo II, acrecentando la situación de congestión entre el Puente Juan Pablo II y Avda Michaihue

Si se construye el puente Chacabuco, sería necesario aumentar la capacidad vial en las vías que accederían a él en San Pedro y Concepción. Surge así la necesidad de construir desniveles con la vía férrea (hipotecando con ello la posibilidad de soterrarla) y la Avda. Costanera en Concepción. A ello se suma la necesidad de soluciones de ingeniería de costo elevado en la conexión con Pedro Aguirre Cerda en San Pedro. Todo esto aumenta los costos y tiempos de construcción del Puente Chacabuco, equiparándolos a la inversión asociada al Puente Bicentenario.

Por otra parte, el reciente terremoto nos recordó de manera trágica nuestra condición de país sísmico que debe diseñar sus redes de transporte y comunicaciones bajo el concepto de “redundancia”, es decir la existencia de alternativas en caso de que un elemento de la red falle. La decisión de priorizar el Puente Chacabuco mantiene a un extenso sector residencial, productivo y portuario, dependiente de sólo un elemento vial: el antiguo puente sobre el Estero Los Batros. Si esta estructura llega a fallar, el sector de Boca Sur, Michaihue y las Comunas de Lota y Coronel quedarán nuevamente aislados.

En contraposición a lo anterior, su alternativa, el Puente Bicentenario al empalmarse directamente con la Ruta 160 al poniente del estero Los Batros, constituye un “By pass” al tramo congestionado de Avda. Pedro Aguirre Cerda en San Pedro de la Paz, de modo que conformará una ruta más expedita de acceso al centro de Concepción (principal atractor de viajes) a través de la Avda. Costanera. El efecto neto de ello será un beneficio tanto para los usuarios que elijan esta nueva ruta de acceso a Talcahuano y Concepción, como para aquellos usuarios que se mantengan circulando por Pedro Aguirre Cerda, quienes verán disminuida la congestión vehicular.

Esto tendrá también un impacto urbano positivo al sacar los vehículos de carga de Avda. Pedro Aguirre Cerda con la consecuente disminución de ruidos, vibraciones y polución.

Por otra parte, se ha informado que el Puente Bicentenario se construirá por el mecanismo de concesiones y por esta razón debe ser postergado; al respecto no resulta evidente la existencia de rentabilidad privada que permita constituir un negocio atractivo, más aún si previamente se ha construido con fondos fiscales y sin tarifa por su uso el puente Chacabuco.

Independiente de lo anterior, el Estado puede construir el Puente Bicentenario y luego aportarlo como parte de la concesión estableciendo en las bases de licitación un mecanismo adecuado de reembolso por el adjudicatario de la concesión a las arcas fiscales de la inversión que anticipadamente realice el Ministerio de Obras Públicas. Mencionamos este punto para dejar establecido que la construcción ahora del Puente Costero por el Estado no limita su posterior concesión y recuperación de la inversión Estatal.

También se ha anunciado que el Puente Costero se posterga en espera de la oportunidad que sea bimodal. Esta bimodalidad se puede implementar por etapas ya que en la práctica un puente bimodal estará constituido por estructuras paralelas pero independientes debido a razones técnicas y normativas que nacen de las obvias diferencias entre los modos ferroviarios y viales. Por otra parte, el emplazamiento actual de la vía férrea no es cercano al empalme del futuro Puente Bicentenario en la comuna de Hualpén. Consecuentemente deberá generarse un nuevo trazado ferroviario que atraviese sectores habitados de las comunas de Talcahuano y Hualpén. Por la naturaleza de los impactos urbano - ambientales de un nuevo trazado ferroviario, su definición y consenso requerirá un largo proceso de modificación de instrumentos de planificación territorial y participación ciudadana.

Por ello es preferible implementar la bimodalidad por etapas, respetando los tiempos requeridos por la modificación del trazado ferroviario sin que esto atrase la construcción de la parte vial del puente Bicentenario..

Señor Director, para no extendernos más, hemos mencionado sólo los puntos que nos parecen más importantes para poner en evidencia la complejidad del problema y las razones que nuestra experiencia profesional en los ámbitos de la planificación urbana y el transporte nos señalan para indicar responsablemente que se comete un grave error al priorizar el Puente Chacabuco sobre el Puente Bicentenario.

El orden en que estos puentes se construyan no es irrelevante para nuestra comunidad, puesto que durante el período que transcurra hasta que se construya el Puente Bicentenario se mantendrán y aumentarán los niveles de congestión pre terremoto, que ya afectan gravemente la comuna de San Pedro.

La intención de esta carta es hacer presente nuestra preocupación a las autoridades comunales, regionales y representantes gremiales para iniciar un análisis técnico más profundo debido a la importancia de la decisión que debe tomarse.

Nuestras autoridades aún están a tiempo de tomar la decisión correcta para evitar que la Región termine construyendo con fondos públicos, siempre escasos, el puente equivocado.

Atentamente,

Bernardo Suazo P.
Arquitecto
Vice Decano Facultad de Arquitectura Urbanismo y Geografía
Universidad de Concepción
Eduardo Rivera
Arquitecto
Docente Universidad de Concepción
Claudia G. Lima
Arquitecto y Urbanista
Docente Universidad de Concepción
Alejandro Tudela R.
Ingeniero Civil
Docente Universidad de Concepción
Mónica Woywood Y.
Ingeniero Civil
Docente Universidad de Concepción
Héctor Díaz C.
Ingeniero Civil
Docente Universidad de Concepción y Consultor Independiente
Hugo Rubilar S.
Ingeniero Civil
Consultor Independiente
Solange Loyer C.
Ingeniero Civil
Docente Universidad Católica de la Santísima Concepción
Alejandra Riquelme G.
Arquitecto
Consultor Independiente
Lorenzo Carbonell T.
Arquitecto
Director Departamento de Urbanismo
Universidad de Concepción
Victor Fuenzalida Z.
Consultor en Transporte Terrestre
Rafael Muñoz N.
Ingeniero Civil
Consultor Independiente
Richard Zapata G.
Ingeniero Civil
Consultor Independiente