sábado, 28 de enero de 2012

Greenpeace Urge Al Gobierno Chileno A Salvar Al Jurel De La Extinción



La sección chilena de la organización ecologista Greenpeace urgió hoy al Gobierno de Sebastián Piñera a adoptar “una posición más decidida”, con medidas tendentes a salvar de la extinción al jurel, un pez pelágico otrora abundante y hoy en peligro.

El llamado se difundió a dos días del comienzo, el próximo lunes, de una reunión del Grupo de Trabajo de Alto Nivel de la Organización Regional de Pesca del Pacífico Sur (Orgpps) que se extenderá hasta el 2 de febrero en la capital chilena.

En los años 80 y 90, las capturas de jurel en el Pacífico Sur llegaron a sumar entre cinco y seis millones de toneladas anuales y para el año 2011, en una reunión celebrada el enero de ese año en Cali (Colombia), la Orgpps fijó una cuota total de 520 mil toneladas, un 40 por ciento menos que el año anterior.

Según Greenpeace, Perú se excedió en la parte de esa cuota que le correspondía.

Para este año, la organización ha propuesto reducir esa cuota un 50 %, a 260 mil toneladas.

Este volumen es respaldado por la Subsecretaría chilena de Pesca, pero según Samuel Leiva, coordinador de campañas de Greenpeace, las cuotas oficiales establecidas para el 2012 en Perú (200 mil toneladas) y Chile (225 mil toneladas), ya sobrepasan dicha meta.

Ello, “sin considerar las capturas de otros países como China, la Unión Europea, Rusia o Corea del Sur, entre otros, que no se han adherido a las medidas interinas de la Orgpps, mientras Ecuador ni siquiera ha firmado el texto de acuerdo para la creación de la entidad.

El Gobierno chileno, según han señalado autoridades de la Cancillería y de la Subsecretaría de Pesca, propondrá en la reunión realizar una nueva evaluación de población del jurel y la creación de un comité de cumplimiento de las medidas que no incorpore datos de captura que no hayan sido verificados.

Además, planteará que las reuniones del Subgrupo de Trabajo Científico del Jurel sean más extensas, para poder revisar con mayor tiempo los datos de las capturas, con la intención de que las que no cumplan las medidas sean declaradas pesca pirata.

Para Samuel Leiva esas medidas “rayan en lo mismo que se ha venido haciendo desde el 2007 y que ya fracasó. Esta experiencia, más la dramática situación actual del jurel, exige de nuestro Gobierno medidas más audaces para proteger y recuperar la especie”.

A su juicio, según señaló en un comunicado de Greenpeace, “los países que no han respetado los acuerdos de manejo del recurso están poniendo en peligro el futuro de la pesquería y obstaculizan cualquier medida de conservación y protección que se pueda aplicar para evitar el colapso final del recurso”.

“Hacemos un llamado a que en la reunión de Santiago se hagan compromisos públicos para ratificar a la brevedad la convención para que las medidas sean vinculantes y no voluntarias. No hay más tiempo que perder”, subrayó.

El “Trachurusmurphyi”, o jurel chileno se captura al oeste de Chile y Perú, a lo largo de una franja de 6.600 kilómetros, hasta aproximadamente 120 grados de longitud, a mitad de camino hacia Nueva Zelanda.

Rico en ácidos grasos, la mayor parte del jurel capturado se transforma en harina de pescado para ser consumido en la acuicultura y en las granjas de cerdos.

Sus propiedades llevaron al jurel a convertirse en objeto de una pesca agresiva, que en sólo dos décadas, redujo su volumen desde unos 30 millones de toneladas a menos de tres millones en la actualidad.

Fuente: El Dínamo.cl