lunes, 25 de marzo de 2013

Once Nuevas Patologías Al Auge Complican Más A La Saud Pública Y Siguen Enriqueciendo La Salud Privada

El pasado 21 de Marzo autoridades del Ministerio de Salud anunciaron que a partir del 1 de julio próximo se incrementa en 11 el número de problemas de salud cubiertos bajo régimen de garantías AUGE, elevándose a 80 el total de enfermedades complejas desde el punto de vista de salud y catastróficas desde la mirada económica, que cuentan con dicha protección legal.

Si el tema se analiza desde la perspectiva de las familias beneficiadas por dicha medida, es obvio que su opinión no puede ser otra que de total alegría y satisfacción. No debiera ser la misma mirada la de quienes siendo portadores de problemas de salud tanto o más complejos, quedan sin dicha protección e incluso ven mermadas sus posibilidades de atención en el sistema público que por ley se ve obligado a privilegiar las patologías incluidas en el régimen AUGE.

Desde la perspectiva de las y los miles de funcionarias y funcionarios de hospitales y consultorios, el anuncio se analiza en relación con la mayor complejidad que supondrá hacerse cargo de las mayores obligaciones AUGE en un escenario de serios déficits en materia de recursos humanos, equipamiento e infraestructura, con la certeza además que la comprensible molestia de quienes acudan a sus establecimientos y no encuentren la respuesta esperada, caerá ellas y ellos, los que dan la cara día a día.

Para la CONFUSAM, además de lo ya señalado, los anuncios del Gobierno deben ser analizados planteándose en torno a las consecuencias en el corto y mediano, tanto respecto de la capacidad del sistema público para responder, como de las amenazas implícitas que supone para su desarrollo futuro. En esa dirección, con los antecedentes de lo ocurrido en materia de recursos económicos desde que se impuso el AUGE que muestran que el sistema público ha sido incapaz de hacerse cargo de las garantías explícitas dadas las crónicas falencias ya mencionadas, lo que a su vez determinó el traspaso anual de cientos de miles de millones de pesos del presupuesto de la salud pública hacia el sector privado para comprar prestaciones que el sector público no podía resolver, lo que queda claro es que los que más se verán favorecidos con las nuevas medidas del Ministerio de Salud serán las empresas que lucran con la enfermedad de las  los millones de chilenas y chilenos. Por más que enfáticamente las autoridades nieguen sus intenciones de privatizar la salud, en la práctica, los hechos hablan por sí solos y estos anuncios, claramente son un nuevo avance a favor de la privatización.