domingo, 3 de marzo de 2013

Chile Vive Su Exuberante Fiesta De Consumo

Fue una imagen tan insólita como inesperada: a comienzos de febrero, las colas en el Aeropuerto Internacional de Santiago superaban los 150 metros de largo y las tres horas de espera.

"¿Acaso a todos los chilenos se les ocurrió viajar hoy?", se preguntaba Javier Parada, un estudiante universitario que intentaba volar desde esta ciudad a Buenos Aires, lo que sólo lograría a duras penas y con el avión de LAN repleto.

Según la Junta Aeronáutica Civil, 2012 registró la variación más brusca del último lustro en viajes nacionales e internacionales, con más de 15 millones de vuelos (pasajes), un aumento de casi el 20% en viajes en avión. Es decir, casi un viaje por cada chileno.

La historia terminó con el gobierno adelantando la licitación de su terminal aérea y anunciando que ésta hará crecer su capacidad anual de nueve a treinta millones de pasajeros.

La sensación térmica es que todos parecen gastar como si se hubiese anunciado el fin del mundo. Supermercados, shoppings y restaurantes se atiborran como nunca, el "dinero plástico" bulle y nadie se quiere quedar fuera de la fiesta del consumo.

¿Y a qué responde este nuevo boom de gasto? En el oficialismo, siempre tan celoso de que no se les reconozca mérito alguno, tienen una sola respuesta: a las bondades de las políticas económicas, laborales y sociales vigentes, representadas en una tibia leyenda que los ministros intentan imponer en las redes sociales y en cada entrevista que dan: "No es casualidad".

"Todo se sustenta en el buen desempeño de la economía, que ha permitido que las necesidades de movilidad de los pasajeros de turismo y de negocios sean absorbidas por el transporte aéreo", dice el ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Pedro Pablo Errázuriz.

A ciencia cierta, las ofertas también son apabullantes. La fortaleza del peso chileno frente al dólar permite a muchos tener acceso a paquetes de viaje que antes eran prohibitivos.

Elija: Cancún, la Riviera Maya o Aruba, con todo incluido, por precios que van entre los 700 y los 1200 dólares por persona. Doce noches de cruceros por el Caribe, el mar Báltico o el Mediterráneo por menos de 2000 dólares. O quizás ocho días de circuito por las principales ciudades de Europa por 980 dólares. Todo ello pagado en cuotas e incluso con tarjetas de retail .

Las bondades de la minería

Pero quizá donde mejor pueda percibirse esta estampa de "nuevo rico" sea en la región de Antofagasta, en el norte chileno, la zona con la mayor expansión económica de los últimos años gracias a las bondades de la minería.

En lo que ya se ha convertido en un fenómeno sociológico digno de estudio, todos los veranos las miradas del país se posan en el proceso de negociaciones colectivas de los sindicatos de mineros.

El proceso, que cualquiera juzgaría de una abulia inenarrable, es seguido por los canales de televisión como si se tratase de un reality show , sólo para ver cuál será el nuevo récord de bonos y en qué gastarán su dinero los trabajadores.

Este año, sin ir más lejos, Escondida, la mina de cobre más grande del mundo, que pertenece a la anglo-australiana BHP Billiton, entregó casi 50.000 dólares a cada uno de sus empleados, además de subirles el sueldo e incrementarles los bonos de gestión y productividad.

Entonces, y en una perfecta secuencia de realismo mágico, se anunciaron en Antofagasta los bonos de descuento y ofertas de viviendas, coches y artículos tecnológicos. A continuación -y estamos hablando sólo de 24 horas después- se agotaron los departamentos, las camionetas 4x4 y los televisores Full HD.

El consumo se multiplica por sí mismo, mientras todo el resto del país ve cómo el "sueño americano" está más cerca de lo que creía.

Hasta sus más acérrimos detractores reconocen al actual presidente, Sebastián Piñera, que su gobierno dejará un legado de crecimiento económico, sustentado en la reconstrucción de viviendas e infraestructura pública devastada tras el sismo de febrero de 2010 y la creación de casi un millón de empleos.

"El shopping de la desigualdad"

Hoy, Chile cuenta con bajos índices de desocupación históricos, apenas del 6%, y un fuerte repunte del PBI per cápita, que lo ha convertido en el nuevo líder regional. De acuerdo con todos los pronósticos, este índice superará la barrera de los 20.000 dólares por persona este año.

¿Será éste el Chile real? Por supuesto que no. Según la Cepal, la desigualdad en Chile se mantiene en niveles indignantes, con un 11% de pobreza y una indigencia superior al 3%, muy lejos de sus nuevos y elegantes socios de la OCDE.

"Chile es un negocio, un gran shopping de la desigualdad", repite una y otra vez el sacerdote y ex vicario de la pastoral social, Alfonso Baeza.

Sus palabras, y esto es más que una simple metáfora, son silenciadas, también una y otra vez, por el ruido de las cajas registradoras, el despegue de un avión y el rugido del motor de una camioneta todoterreno.

Escrito por Carlos Vergara
Fuente: La Nación.com